Todos tenemos una "peor cita" que contar, y la mía vino de mi primera incursión seria en las citas online. Conocí a Marco en una sala sobre viajes. Parecía el hombre perfecto: aventurero, gracioso y teníamos el mismo sueño de viajar a Japón. Hablamos por dos semanas y decidimos quedar.
El desastre: Cuando llegó al café, en lugar del hombre que describía ser un mochilero con una vida "simple", me encontré con alguien que no paró de hablar de su coche de lujo, sus ganancias y cómo "la gente normal" no entiende su estilo de vida. No era el aventurero humilde que yo había conocido en el chat; era un braggart.
Lo que aprendí:
- No idealices la foto: Me enamoré del perfil y no de la persona. Hay una gran diferencia entre la versión editada y la realidad. Mantén tus expectativas bajo control.
- Profundiza con preguntas: Antes de quedar, ahora siempre pregunto sobre valores (qué piensan sobre el trabajo, la familia, el dinero) y no solo sobre hobbies. Los valores son mucho más difíciles de fingir.
- Confía en tu instinto (o 'Red Flags'): Una vez, durante un chat, Marco canceló una conversación porque "tenía que hablar con su asistente". Pensé que era un signo de éxito, pero era una señal de que su ego dominaría la conversación. Si algo se siente "off" en el chat, escúchalo.
Recuerda: Los fracasos en las citas no son un reflejo de tu valor. Son solo experiencias que te ayudan a afinar tu radar para encontrar a la persona correcta.
👉 Consejo de la experiencia: Haz una llamada de 5 minutos antes de la cita para escuchar su tono de voz y confirmar que la vibra es la correcta.
